[Mayo 2016]
Recorrer nuestro país por tierra ha sido un descubrimiento día a día. Antes viajábamos en auto a las cercanías de Santiago o por bus hasta Chiloé o La Serena, pero ahora, a bordo de nuestra querida casa rodante “Piscola”, nos hemos dado el lujo de visitar rincones que antes no teníamos idea que existían. Acá enumeramos nuestros favoritos del norte:
- Caleta Cifuncho: Ubicada a 270 kms. al sur de Antofagasta, esta tranquila y hermosa caleta nos enamoró desde un principio. La visitamos en el mes de Mayo por lo que éramos casi los únicos afortunados en disfrutar esta playa de aguas calmas y transparentes.
Conocimos a una pareja de checos que venían en una Westfalia 4×4 pero no se atrevían a meterse a la arena. Nosotros los alentamos –mala idea- y muy decididos se aventuraron a la playa. Al poco rato estaban enterrados hasta el cogote y todos nosotros en cuatro patas intentando sacarlos de ahí. Estuvimos horas, no sé cuántas, hasta que llegaron unos pescadores de la Caleta. Tocan los neumáticos y les hacen desinflarlos aún más. Después el pescador bajó de un ala al checo del volante, se subió de piloto y sacó rajao la Westfalia de la arena… así no más! El que sabe, sabe…
Disfrutamos 3 días de esta playa, del sol y la tranquilidad. Vic, por supuesto, salía a pescar varias veces al día, hasta que un día el Reto me pregunta: “Oye, y Víctor alguna vez pesca algo?” Pucha, bueno, sí, a veces… Y justo lo vemos a lo lejos, caminando hacia nosotros, arrastrando “algo”. Cuando se acerca, levanta el “algo” y era una tremenda corvina!!!
- Parque Nacional Pan de Azúcar. Ubicado justo en el límite de las regiones de Antofagasta y Atacama y a 190 kms al sur de Caleta Cifuncho, este parque, al igual que la ciudad de Chañaral, fue arrasado por el aluvión de Marzo de 2015, cerrando su acceso norte y cambiando por completo la geografía del lugar.
Tiene unas playas preciosas, senderos de trekking y se pueden hacer expediciones en bote para ver pingüinos de Humboldt, pero nosotros no fuimos.
Al ser temporada baja cuando lo visitamos, no estaban cobrando entrada y el Camping estaba a la mitad ($10.000 en vez de $20.000) porque los baños estaban sin agua y por lo tanto tampoco funcionaban las duchas.
- Bahía Inglesa y las playas del sur. 130 kms. más al sur y a sólo 20 minutos del Aeropuerto de Copiapó se encuentra este balneario de aguas turquesa. Era Mayo y hacía frío como para bañarse, pero de todas formas disfrutamos de las lindas vistas y playas cercanas.
A través de un amigo llegamos a la casa de Mariana y Maximiliano, una pareja viajera y aventurera, llenos de vida e historias, con quienes compartimos una rica comida y varias botellas de vino!
También conocimos a su hija Javi y su pareja Christian que nos invitaron a alojar a su casa, también compartimos ricas comidas, vinos y piscolitas y nos cuidaron la camioneta mientras visitábamos a nuestros papás en Santiago por sus cumpleaños n°60 y 70… no podíamos faltar, no?
Un poco más al sur de Bahía Inglesa llegamos a Bahía Cisnes, donde acampamos en un alto con una vista preciosa. Sumamente tranquilo y silencioso, sólo podíamos escuchar la fuerza del mar.
Y otro poco más allá, a unos 25 kms. llegamos hasta Playa La Virgen que es un terreno privado, donde si quieres estacionarte abajo, cerca de la playa, tienes que pagar $10.000.
Como nosotros queríamos acampar y llegamos en casa rodante, nos querían cobrar $35.000 por el camping que ni siquiera tenía ducha… no podíamos creerlo. Después de hablar un rato con el Administrador, hicimos un trato y nos dejó a precio de carpa $7.000 el sitio. Ahora sí nos estamos entendiendo!
- Ruta costera 4×4 Huasco – Punta de Choros. Más que una ruta es una huella, que a ratos se pierde y repentinamente aparece dividida en 4. Al comienzo es arena blanda y luego cambia a rocas puntiagudas, para después andar un rato sobre bichufita y luego volver a la arena, y así… por 90 kms que recorrimos lentamente en 3 días.
Una ruta que bordea el mar con unos paisajes maravillosos, pasando por pequeñas caletas de pescadores que últimamente se han dedicado a sacar algas más que pescados por las constantes marejadas.
Por supuesto que no hay campings, ni hostales y mucho menos restoranes. Es una ruta definitivamente NO turística, más bien para aventurarse a descubrir cómo el desierto se mezcla en la inmensidad del océano.
Una vez que llegas Punta de Choros ya te sientes nuevamente en la civilización. Acá encontrarás básicamente, de todo.
Desde esta caleta también salen tours a la famosa Isla Damas, conocida por sus playas de aguas turquesa y por que la habita una colonia de pingüinos de Humboldt. Nosotros lamentablemente fuimos en la época de anidación y en CONAF nos dijeron que con suerte veríamos un pingüino… no valía la pena. Será para una próxima oportunidad!
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Enjoyed your wonderful tour of Chile. What magnificent beaches. Please take care and enjoy hearing from you always. Cheers,Val
Thanks dear Val 🙂 Stay tunned for the next one! Hugs from the south!